El alumno piloto y su instructor se eyectaron sin consecuencias. Afortunadamente los asientos Martin-Baker del C-101 tienen capacidad cero-cero.
Lo curioso de la historia es que el avión sin control continuó su camino hasta que empezó a girar sobre la pata izquierda que tenía la rueda dañada. Nótense las guias extendidas de los asientos eyectables y la ausencia de la cúpula en el avión abandonado. Los bomberos, a la derecha de la imagen acaban de llegar. Parece ser que el avión estuvo girando sin control durante ¡¡20 minutos!!.
Cuenta la historia que una Bücker de la AGA aterrizó sola. Piloto e instructor saltaron a tener una parada de motor. El avión se encontraba encarado a la base, y al parecer con ese peso de menos llegó sola y aterrizó. Supongo que solo será una leyenda urbana
ResponderEliminarEso es un avión bien hecho y lo demás tonterias.
ResponderEliminar¡Bravo por el culopollo!
¿Un poco precipitado lo de eyectarse? Me parece que el instructor va a tener que dar muchas explicaciones a sus mandos :-p
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